Actos-Homenajes a Octavio Uña Juárez


Octavio Uña Juárez fue homenajeado el día 12 de Noviembre de 2019 en el Ateneo de Madrid.  Se dieron cita numerosas personalidades del mundo académico y de la cultura, para rendir homenaje al profesor Uña Juárez. Con motivo de este acto, se presentó el libro homenaje: "Intellectum valde ama" - Ama intensamente la inteligencia. Tres volúmenes, que hablan de su vida y obra, de las Ciencias Sociales y las Ciencias Humanas. En él se recogen más de 300 intervenciones de profesores, escritores, poetas y autoridades académicas. 

El Grupo Literario Guadiana homenajea a Octavio Uña Juárez

El acto fue conducido por la presidenta del Grupo Literario Guadiana, María Teresa Sánchez Ruiz, en modo entrevista al homenajeado


Homenaje a Octavio Uña - Alumnos del Real Colegio Alfonso XII

Octavio Uña Juarez homenajeado por sus actividades culturales en Madrid (universidades, colegios mayores, cafés literarios, casas regionales, Ateneo...) por La Tertulia El Rastro

El día 20 de enero de 2023, el Teatro Ramos Carrión acogió un brillantísimo  acto en el que  se rindió homenaje al ilustre zamorano Octavio Uña. Una tarde memorable, de gran calado intelectual, donde  las personas que acompañaron al zamorano  dejaron constancia del inabarcable trabajo que a lo largo de los años ha desarrollado.

Presidió el acto Francisco José Requejo Rodríguez, presidente de la Diputación, quien dirigió unas palabras de agradecimiento y bienvenida a los asistentes para, a continuación, intervenir  todos los integrantes de la mesa que acompañaban a Octavio. El primero en hablar fue José Antonio Lera, amigo del homenajeado desde la infancia, que mencionó algunos recuerdos entrañables que compartieron y, por supuesto, de la larguísima trayectoria intelectual de su amigo. Intervinieron también, Rafael Lazcano González, Manuel Ángel Delgado de Castro, José Manuel Canales Aliende y, por último, Octavio Uña quién, una vez más, entusiasmó a los presentes con su sapiencia y su verbo, pero también con su emoción al hablar de esta tierra nuestra, tan espléndida y bella; y tan maltratada. Fue un acto entrañable y de gran nivel intelectual. Cada uno de los participantes lo pusieron de manifiesto con sus disertaciones.

Al finalizar, los organizadores y amigos de Octavio se reunieron en el parador para compartir momentos de amistad y concordia con vinos y productos de la tierra.

Se presentó la obra: " Intellectum vade ama", Ama intensamente la inteligencia. (San Agustín)

Una obra compuesta por tres volúmenes donde participan cientos de amigos del profesor de todos los ámbitos de la cultura: profesores catedráticos,  poetas, escritores,  dramaturgos, ensayistas... personas  de todas los lugares del mundo por los que el profesor ha dejado su sapienza. Cada uno de ellos loa la trayectoria de Octavio Uña. Me honro de haber colaborado con un poema de mi autoría  dedicado al profesor en esta magna obra.


Concha Pelayo


Los poetas rindieron homenaje a Octavio y le entregaron una hermosa placa que decía:

"Por su constante dedicación a la cultura escurialense"

Bajo la presidencia de Dña. María Cruz Llorente Martínez.

Universitas

Tengo para mí que la característica que singulariza a Octavio Uña es la 'universitas', su escrutinio panorámico y globalizador de la realidad. Porque en su persona convergen muchos saberes. Saberes filtrados por un doble crisol: el de la rigurosa reflexión intelectual, y el del refinado tamiz del lenguaje poético. No; no son introspecciones muy diferentes, pues una y otro resultan de procesos cognitivos significativamente parejos...

Espejo de esa 'universitas' octaviana es este "Intellectum valde ama" en el que colegas, discípulos y amigos homenajeamos su magisterio.

Jesús Majada Neila, catedrático y escritor

Por Apuleyo Soto.


Es Octavio Uña Juárez

un poeta probo y sabio

al que el Ateneo emérito

de Madrid ha homenajeado,...



(para ver completo pinchar en "Al hilo de la vida". Blog de Apuleyo Soto.Abajo)

Reseñas y artículos escritos sobre el Homenaje a Octavio Uña Juárez

Reseña escrita por Miguel Ángel Delgado. Profesor de Literatura. "Notas sobre el Libro - y CD Rom- Homenaje a Octavio Uña Juárez".

Reseña de Jose Luis Palacios Gómez - Intellectum valde ama - Octavio Uña Juárez

 Reseña de:

Rafael A. LAZCANO GONZÁLEZ (Ed.) INTELLECTUM VALDE AMA - AMA INTENSAMENTE LA INTELIGENCIA (SAN AGUSTÍN, EP. 120, III, 13, 4). HOMENAJE AL PROFESOR OCTAVIO UÑA JUÁREZ, CATEDRÁTICO DE SOCIOLOGÍA Y FILOSOFÍA, ESCRITOR Y POETA. Pozuelo de Alarcón (Madrid): Rafael Lazcano Editor. 2019. 2035 pp.


Terminaba el año 2019 cuando nos reunimos en el Ateneo de Madrid unas centenas de amigos, compañeros y discípulos del profesor Octavio Uña para triburtarle un merecido reconocimiento en la presentación de un extensísimo libro que, con tres volúmenes y más de dos mil páginas, expresaba el homenaje con que queríamos celebrar su larga y rica trayectoria en la Universidad y en el mundo de la cultura: Intellectum valde ama. Primorosamente editada por Rafael Lazcano, la obra responde ciertamente al célebre aforismo agustiniano ("Ama Intensamente la inteligencia") y alberga un abigarrado elenco de varios cientos de contribuciones de variado contenido, distribuidas en nueve apartados temáticos, que de alguna manera se hacen eco de los múltiples campos del saber, el sentir y el hacer en los que el homenajeado ha recalado a lo largo de su dilatada singladura vital: su actividad docente e investigadora en la Filosofía y la Psicología, la Ciencia Política y la Sociología, el Derecho y la Economía; la gestión institucional y la edición libraria, la dinaminazación cultural y el mecenazgo; las actividades promotoras de la comunicación y el lenguaje; y, destacadamente, la Poesía.


Catedrático de Filosofía en su primera etapa docente, y de Sociología después en tres universidades españolas, en las que también desempeñó como director de departamento, profesor visitante en numerosas universidades extranjeras, la labor pedagógica de Octavio Uña es difícil de resumir en unas pocas líneas. Variadas asignaturas impartidas, numerosas investigaciones desarrolladas, decenas de tesis dirigidas, cursos de doctorado, innúmeras conferencias citadas,... Una densidad y una intensidad docente tan dilatada como señera, de la que en las primeras páginas de Intellectum valde ama se da cumplida cuenta para aquellos que no la conozcan con mayor detalle y quieran asombrarse de la incansable actividad de este profesor universitario. Mas aún si a la cuenta docente se añaden su actividad investigadora y una producción intelectual que abarca una veintena de libros y más de un centenar de artículos en revistas científicas.


Capítulo aparte merece la vertiente poética de Octavio Uña, que corre paralela a la académica desde siempre y que se exhibe en texto y poemarios que al menos de 1976 (Escritura en el agua) nos han hecho vibrar con el verbo profundo y rotundo de sus compases líricos, en los que con frecuencia resuena la Castilla dura, luminosa y eterna que tan preciosamente evoca (Castilla, plaza mayor de soledades). A los amantes de su poesía y a los que quieran descubrirla, no puede dejar de recomendárseles su Iluminaria, publicada en 2017, un compendio de su obra poética que nos acerca a sus mejores textos.


Únase a todo lo anterior, tan escuetamente señalado, su papel insustituible como impulsor de la Asociación Castellano-Manchega de Sociología (que en 2019 alentó su 24º Congreso de Sociología, internacional desde 2015), de la que es presidente, y de la Revista Castellano-Manchega de Ciencias Sociales Barataria (que publicará en 2020 su número 27), que dirigió desde su fundación en 1998 hasta 2016, y se advertirá, siquiera aproximadamente, el alcance de la obra del profesor Octavio Uña en su expresión multifacética.


En este libro-homenaje Intellectum valde ama, tan atributado como interesante, se reúnen autores de muy diversa precedencia: profesores, juristas, sociólogos, economistas, filósofos, gestores y administradores públicos, poetas y escritores, que con frecuencia son colegas profesionales, muchas veces son discípulos y casi siempre son amigos. Que desde tan variopintos ámbitos concurramos en un mismo texto en torno a una misma persona da noticia indudable de la calidad del hombre y del maestro. Son tantos los que participan en el libro  a lo largo de los tres volúmenes que resultaría excesivo y tedioso mencionarlos a todos, e injusto y forzosamente parcial mencionar solo a algunos. Baste decir que entre ellos los hay egregios y afamados, al lado de los menos célebres pero igualmente dignos y animosos, y que todos han aportado unas páginas en las que ha vertido algo apreciable de su oficio y también de us estima por el homenajeado. Para aquellos interesados en los aspectos de las historia vital del profesor Uña, unas docenas de semblanzas les permitirán aproximarse a su andadura más mundana y, en ocasiones, más íntima; para los que quieren conocer más de cerca su faceta poética, otras tantas contribuciones; para quienes deseen saber de su labor académica a través de los textos de colegas y discípulos, más de un centenar.


Intellectum valde ama es una obra con una vocación totalizante. Permite al lector aproximarse a una figura relevante de la vanguardia intelectual española contemporánea y ofrece una muestra representativa del alto nivel alcanzado en las Ciencias Sociales de nuestro país. Entreteje perspectivas, visiones libres, laboriosas, calificadas y sugestivas de muchos y diversos autores. Es variada y poliédrica, sin seguidismos escolásticos ni enfoques prefijados. Es, de algún modo, reflejo del estilo intelectual en las percepciones del mundo social y abierto en sus interpretaciones, y marcadamente humanista en la óptica con la que contempla los fenómenos estudiados. Los cinco últimos capítulos del libro, que se extienden por casi mil quinientas de sus páginas, albergan los trabajos teóricos y empíricos de más de cien autores de distintas nacionalidades e instituciones. Enmarcados en grandes áreas temáticas (sociología de la literatura, sociología del conocimiento, de la cultura y la comunicación, sociología de la educación, teoría sociológica, economía, empresa y relaciones laborales, gestión pública, ciencia política), se detienen en un heterogéneo conjunto de cuestiones, algunas generalistas, otras muy concretas, y siempre interesantes y actuales o, en todo caso, no periclitadas. Entre ellas se abordan asuntos como la modernidad, la globalización, la robótica, la inmigración, el federalismo o la integración social, al lado de otros como el liderazgo, la igualdad jurídica y laboral, la gestión del conocimiento, el lenguaje publicitario o las redes sociales. Y no faltan tampoco aportaciones que una vez más nos conectan con Max Weber, David Ricardo o Juan de Mariana. Una miscelánea abundantísima, sugestiva, plena de cuestiones palpitantes, casi prodigiosa en su pluralidad, que sin embargo no satura, no apabulla, pues concede al lector, entre tantas opciones, el privilegio de escoger y demorarse en las que perciba más próximas, o más raras, o simplemente más apetecible, sin otra restricción que su apetencia.


La obra, en suma, no solo es la expresión material del homenaje dispensado a Octavio Uña en merecido reconocimiento de su persona en todos los órdenes, sino una suerte de pieza coral de académicos, escritores y especialistas de las Ciencias Sociales y las Humanidades. Muy diversa en sus contenidos, pero de alguna manera armónica, articulada sobre el propósito de ofrecer al lector una panorámica rica y variada de esas disciplinas y saberes, en precisa correspondencia con el talante y el trabajo intelectual del homenajeado. Si alguna vez un texto de dos mil páginas ha merecido un espacio en nuestra biblioteca para gozar de su lectura y para que nos recuerde simbólicamente el valor al que alude, sin duda es esta.


Madrid, 17.04.2020

José Luis Palacios Gómez

Sociólogo de la Administración Local del Estado


INTELLECTUM VALDE AMA - HOMENAJE OCTAVIO UÑA JUÁREZ

Ama intensamente la inteligencia 


Mi querido amigo y contertulio OCTAVIO UÑA, compañero también en el feliz compromiso de sacar a la luz pública todos los meses, excepto en agosto, la Revista digital POLIEDROS de Cultura y Sociedad, que con tanto acierto conduce nuestro estimado amigo MARIANO AZORES, de ya antiguas y múltiples andanzas por los vericuetos caprichosos del amplio arco iris de la cultura en general y de la Villa de Madrid en particular, y que un servidor tiene el honor de dirigir, seguramente con más emoción que acierto.

Quiero decirte, con cariño y admiración, que el libro INTELLECTUM VALDE AMA, es una maravilla, preparado por una pléyade de catedráticos como profundo HOMENAJE a tu persona y a tu labor inmensa, genial, única… efectuado en la sala magna del ilustre Ateneo de Madrid, el pasado 12 de noviembre 2019, con asistencia masiva de tus colegas, amigos y admiradores, entre los que tuve la satisfacción enorme de asistir.

Me encantaría poder darte mi opinión, pero estoy en un buen lío, porque ¿qué tema elijo de tu gigantesca obra?, y aquí radica mi enorme dificultad. Además, cómo puedo yo salir airoso de este trabajo después de haber analizado tu obra con amplitud y su mochila llena de sabiduría y conocimientos la citada pléyade de catedráticos, escritores, poetas, profesores, investigadores… y también compañeros y hasta alumnos tuyos?. Complicado lo tengo.

Es tan amplio y variopinto tu arco iris intelectual, que me resulta imposible hacer ni una reseña mínima de cada uno de los pétalos que conforman la incomparable margarita de tu amplia erudición.

Amigo Octavio, ¿Hablo de tus habilidades como profesor?, Hablo de tu entusiasmo por aprender y saber?; de tu incansable actitud en la búsqueda permanente de las verdad y la belleza de las cosas?; Hablo de tus altos conocimientos de la historia?, de tu profunda información sobre los grandes maestros y eruditos de todos los tiempos: Calderón, Cervantes, Lorca, Unamuno, Machado Ortega y Gasset, Aleixandre, León Felipe… por citar solo a sabios españoles?.

Hablo de tus múltiples conferencias de amplio significado?;  de tus colaboraciones maestras en Universidades de aquí, de allá y más allá?. De los cursos de verano, seminarios…? Hablo como impulsor que eres de la cultura y del patrimonio histórico de El Escorial, Real Monasterio y la Villa de San Lorenzo?; de tus estudios y estancias en Alemania, Inglaterra, Bélgica, Estados Unidos…?; de tus docenas de libros de poesía?. Hablo de la importancia de haber nacido en un pueblo, con toda la sabiduría que atesoran, transmitida de padres a hijos a través de los tiempos?

Para ir tomando impulso, tomo prestado un excelente párrafo de Rafael Lazcano, editor de este libro maravilla, que estamos deshojando, que dice:

“El profesor Octavio Uña, nos enseña también, y de qué manera, a través de este libro-homenaje, con sublime gravedad y sobriedad cómo vivir en este mundo desde la autenticidad, la verdad y la justicia. Como ilustre figura, guía y modelo de académico humanista, el Profesor Uña es referente para las generaciones presentes y futuras, por el impulso dado al conocimiento científico y las letras (sociología, filosofía, literatura y poesía), la dignidad humana y el compromiso democrático, aspectos necesarios en nuestra sociedad plural, globalizada y tecnificada”

Por su parte Julia Sáez Angulo, escritora, periodista y poeta, ha escrito:

“El culto y erudito profesor, conoce tanto a los clásicos greco-latinos, que los cita sin traducir. Mi asombro y admiración en este campo no tiene límites. Tiene amplia y despejada cabeza; todo un busto para el bronce o el mármol. Practica la ironía – el humor  de la inteligencia, de don Quijote o más bien de Cervantes- y sus conferencias, discursos y disertaciones  son una fiesta para oídos sabios. La dicción del ponente es siempre bien articulada en castellano, algo que se agradece de veras. Octavio, con su nombre romano tan sonoro, estaba predestinado a grandes cosas”

Pero no quiero quedarme sin opinar, así que elijo tu faceta bella y creativa de poeta “mayor de Castilla”, sabio y dueño de la palabra sugestiva y brillante. Quiero comenzar recordando la Conferencia General de la UNESCO  allá en el año 2000, proclamó la celebración anual del Día de la Poesía, el día 21 de marzo. Entre sus finalidades está impulsar y preservar una de las expresiones artísticas más antiguas que ha desarrollado el ser humano, la poesía, y tú OCTAVIO, con tu actividad creadora y sobresaliente, contribuyes a potenciar dicha iniciativa.

Considero la poesía como un encanto indefinible que conmueve y deleita el ánimo y como exposición artística de la belleza por medio de la palabra, si bien como en otras actividades del espíritu, es indefinible. He leído en alguna parte que son rasgos propios de la poesía el contenido predominante, emocional o imaginario, la relativa brevedad, la concentración emotiva que se manifiesta en el acoplamiento  de pensamiento  y expresión, el uso preferente de la imagen y, también, la presencia del ritmo, en un grado de regularidad, conseguido mediante acentos recurrentes, rima, estrofa y otros efectos musicales.

Tu Poesía OCTAVIO reúne todos los ingredientes que nos permiten establecer la armonía necesaria para nuestros sentidos, con su fuerza comunicativa y estética; hecha con esmero, cariño y dedicación, con extrema ternura y plenitud.

Emilio Jorrín

Director de la revista Poliedros

Octavio Uña, El Intelectual

Intelectual es hoy palabra deturpada, venida a menos, despojada de su sentido genuino. Por ello es preciso restaurarla y pronunciarla cuando sea idónea. Como adjetivo, lo perteneciente al entendimiento; sustantivo, persona que se dedica al cultivo de ciencias y las letras; quien a través de su inteligencia desarrolla un pensamiento crítico en torno a la realidad y cuya comunicación adquiere adhesión racional.

La inteligencia está en relación directa con nuestra capacidad para resolver los problemas que nos plantea la vida, en concreto, y el vivir en sociedad. En Con permiso de los cervantistas, Biblioteca Nueva, Madrid 1948, p. 209, apunta Azorín: “Lo más alto, lo más excelso, lo más exquisito, lo más divino que hay en el hombre es la inteligencia” ¿Por qué no se lee a Azorín?

Octavio Uña es un intelectual de referencia. Inteligencia que genera pensamiento positivo, derramado en centenares de publicaciones y alumnos. Luminosa y reflectante inteligencia. No es inteligente, por oportunista y eficaz que sea su acción, quien se dedica a hacer el mal, a proponer el error, que conduce siempre al horror. El intelectual ayuda a sentir y comprender la vida. No es intelectual quien la sabotea, la esquilma, la aniquila. Para Umberto Eco es aquel que al mirar ve lo que otros no distinguen.

Con ocasión de su retirada oficial de la docencia, en varias universidades, colegas, alumnos y amigos, retomando un saludable hábito universitario de antaño, para testimoniar el suceso, rinden homenaje a Octavio Uña en una publicación excepcional, bajo el lema agustiniano, Intellectum valde ama (s. Agustín, Ep. 120,III, 13.4), ¡Amaintensamente la inteligencia! ¿Por qué no enriquecernos leyendo a san Agustín?

El resultado es monumental. Semblanzas, estudios de sociología, ensayos, poemas, evocaciones de 450 autores,

distribuidos en 3 volúmenes, que completan 2035 páginas. En la tapa de cada volumen aparece una imagen de la Real Biblioteca del Monasterio de El Escorial, teniendo por subtítulo: “Homenaje al profesor Octavio Uña Juárez, Catedrático de Sociología y Filosofía, Escritor y Poeta”.

Al editor, Rafael Lazcano (rafael.lazcano@gmail.com), investigador y bibliógrafo, hay que darle encarecidas gracias por haberse atrevido a una empresa de estas características y culminarla con acierto. Editar una obra, como la que referencio, en papel, en estos tiempos, requiere mucho arrojo, sabiduría y fe en la persona homenajeada. Una valentía, que prueba a su vez que no todo está perdido en la era digital, más basura que jazmines. 

Esta obra coloca al profesor Uña en la proceridad intelectual. En dos mil páginas, poco se habrá quedado en el tintero, aunque es difícil poder recoger la emoción que produce cuando toma la palabra y, sin papel alguno, nos recuerda la historia del mundo, los poemas más señeros, el pensamiento lúcido a través de los siglos. Octavio es un hombre de palabra, de compartir, huele a limpio, construye, ético sajelador de la ética. No importa tanto los títulos, premios y honores que atesora, como su posición ante la vida y el hombre, como su entrega a la docencia, como la sobria y recia textura de su canto. Tienen un reguero luminoso e interminable de alumnos por medio mundo. Y de lectores, y de amigos y de almas que han bebido en el manantial de su riqueza. La docencia no es lucimiento personal, sino enseñar a aprender, compartir inquietudes.

Desde la adolescencia fue un hombre orientado. La orientación no está en relación a la ambición por ser esto o aquello, sino a la convicción de formarse, de utilizar las herramientas necesarias para ahormar un pensamiento y desarrollarlo. Es descubrir la estructura de la inteligencia y fortalecerla, mimarla, exigirle, cultivarla hasta producir el germen requerido, necesitado por sus coetáneos de aquí y de allá. Y todavía.

Se puede ser culto y no inteligente. Erudito y no culto. Vivaz, mordaz, brillante, pero negativo. El halo, el resplandor de la inteligencia, no puede ser ajeno a la decencia, a la integridad, a la entrega más diáfana a los demás. Si no nos ponemos en el lugar del otro, si no aceptamos que los demás pueden tener razón, estamos lejos de la inteligencia. Por la Universidad hemos pasado muchos, pero no por todos ha pasado la Universidad.

El intelectual no es gregario, ni mercenario, ni servil. El intelectual es garante de la libertad, sin la que no hay pensamiento crítico. En contra de B.F.Skinner, no podemos prescindir del acendrado sentido de la libertad. Si la libertad es prescindible, como defiende Skinner, ya estamos en el pozo. Cuestionar la libertad nos pone ya en la cochiquera, en el redil de una manada de ovejas. Sin libertad no hay hombre, sin hombre solo está el instinto animal. “Nos olvidamos del hombre en nombre de la Humanidad”, se excusó Wislawa Szimborska, con ocasión del Nobel, cuando le reprocharon que había transigido con el comunismo más nefando y criminal.

Todo esto es lo que pone en evidencia la figura de Octavio Uña, sin haber sido jamás prisionero de las ideologías del s. XX, ejerciendo un magisterio que ha calado hondo en la conciencia del hombre, como evidencian los contenidos de estas 2035 páginas. Por muy líquido que sea hoy el pensamiento, el pilar de la inteligencia mantiene la estructura del edifico del pensar. Despreciar la lectura es amordazarse.

Octavio es un géiser que brota del pensamiento primigenio, no sólo judeo-cristiano, sino de ese hurmiento que aúna el Oriente y el Occidente, en un canto ecuménico, feraz, deslumbrante, veraz, universal. El Dr. Uña, el poeta Octavio Uña no ha dimitido nunca. Castellano viejo joven, pionero, filoneista, independiente, hielo y llama, ha puesto las bases de los nuevos estudios de la Sociología.

Sociólogo, filósofo, poeta, políglota, socrático, docente, discente, liberal, austero un punto luterano, solidario, conciliador. No es fácil, ni conveniente, separar estas facetas o primar alguna sobre otra, porque es un todo lo que contemplamos, lo que celebramos en las páginas de esta obra magna: la figura de un intelectual (sin adjetivos) de nuestro tiempo. “La lectura no es un alimento, sino un estimulante”, asegura Azorín, op. cit, p.108. Leer las páginas de esta obra es asomarse a un paraíso: ¡Intellectum valde ama!


Tomás Paredes

 Miembro de AICA


Santander, 14 de noviembre de 2019

Querido Octavio:


Solo unas líneas para indicarte que me encantó estar en tu homenaje.

Nada más recibir la amable invitación de Rafael Lazcano vi que se trataba de una magnífica oportunidad para ir a Madrid a manifestarte mi aprecio y admiración. No podía dejar de ir. Siempre te has portado extraordinariamente bien conmigo; te debo mucho y, por tanto, modestísimamente, quería mostrarte mi agradecimiento.

El acto me pareció precioso. La presencia de tanta gente y, por lo que pude observar, tan diversa y de tanta calidad profesional, pone de manifiesto tu gran valía profesional y humana. Como bien dijiste, lo importante es la amistad, el calor humano, el afecto, la lealtad. Tú siempre distribuyes a manos llenas ese calor humano y, por tanto, es normal que la gente lo sepa reconocer.

El marco, el magnífico salón de actos del Ateneo, también jugó un oportuno papel en lograr que el acontecimiento fuera extraordinario.

En definitiva, según mi criterio, todo fue perfecto. Tienes que estar muy orgulloso: mucha gente te quiere, mucha gente reconoce tu gran valor.

Estoy deseando que, como me anunció el editor del libro, me lleguen los 3 volúmenes para ver la indudable calidad de los trabajos que se han reunido. Seguro que puedo aprender mucho.

Te cuento una anécdota: hace unos días, viendo en tu página web una intervención tuya con ocasión de la presentación de un libro de poesía de una amiga, volví a disfrutar de tus enseñanzas: explicabas, como siempre de forma muy brillante, que los mitos reclaman eternidad, anhelo de permanencia frente al terrible paso del tiempo. Pues eso, personas como tu dejan una huella indeleble. Te aseguro que es un privilegio ser alumno tuyo (el más modesto de tus alumnos) y saber que puedo contar con tu amistad. Te aseguro que el otro día me emocionó comprobar que me reconocías después de tantos años.

Seguro que habrá ocasión de encontrarnos; de momento, te reitero mi felicitación, te doy las gracias y te envío un fuerte abrazo.


Juan Carlos Zubieta Irún (Universidad de Cantabria)


Querido profesor Uña,


Después de tantísimos años creo imposible que se acuerde de mí, pero fui uno de sus muchos alumnos en la Facultad de Periodismo de la Universidad de Santiago de Compostela en los años 90. Hoy en día yo mismo soy profesor universitario en Estados Unidos.


Debido a ciertos intereses personales, he estado leyendo varios libros de Karl Jaspers. Los más sencillos, eso sí, como su librito sobre Sócrates, Buda, Confucio y Jesús; mis conocimientos de filosofía no dan para mucho más.


De repente, recordé que usted mencionaba a menudo a Jaspers y que ha escrito mucho sobre él. Mientras leía estos libros me vino a la memoria la imagen de usted sentado tras la mesa del aula, hace ya casi treinta años (usted tenía más o menos la edad que tengo yo hoy, creo), dictando su clase a más de cien estudiantes. Qué buenos recuerdos.


Espero que se encuentre bien. Le mando buenos deseos y un abrazo,



Alberto Cairo


Knight Chair in Visual Journalism.

School of Communication, University of Miami


Artículos Periodísticos sobre el Homenaje a Octavio Uña Juárez